Este año Zaragoza no tendrá Fiestas del Pilar oficiales, aunque sí mantendrá una Ofrenda de Flores con un aforo reducido de 20.000 oferentes. Uno de los sectores que más veía incrementar sus ventas en estas fechas es el de los floristas.
Para el presidente de la Asociación de Empresarios Floristas de Aragón, Rubén Cebollero, a pesar de que para estos Pilares las expectativas son un poco bajas, “afrontamos con ilusión el hecho de que se vaya a realizar la Ofrenda, aunque lejos de los 300.000 participantes que lo hacen normalmente”.
Cebollero agradece a la ciudadanía el apoyo que hasta ahora les está mostrando, manteniéndose fiel a las floristerías y espera que se engalanen con flores los balcones para conmemorar igualmente estas fechas. Además, señala, que “algunas parroquias se van a unir a esta celebración, realizando actos con pequeñas ofrendas al no poder acudir a la convencional”.
Y lo que no se pierde nunca en estas fechas es la tradición por comer y pasar una buena sobremesa con tus familiares y amigos. En la céntrica pastelería Fantoba lo saben muy bien, y es que tal y como indica su propietaria, Ivana Fantoba, ahora ya “se va respirando normalidad. Los clientes no dejan de comprar los clásicos mantos del Pilar, bombones y dulces, sobre todo, durante los días 11 y 12 de octubre”.
Asimismo, este sector ya nota que hay mucho más movimiento de turistas en la ciudad que se acercan a “darse un homenaje”, incluso ven más afluencia que en tiempos anteriores a la Covid. Porque, a pesar de los tiempos de pandemia, “a todo el mundo le gusta celebrar para olvidarse un poco de los malos momentos”.
Por último, José Luis Muñoz, presidente de la Asociación de Detallistas de Alimentación, lamenta la “incertidumbre” que todavía provoca esta situación sanitaria. Y espera que, al tratarse de ventas en el momento, la gente se anime a celebrar estas fechas en familia, disfrutando y comprando productos de la tierra en los establecimientos de proximidad.